Correr, caminar, pedalear, trepar, nadar, saltar...Trabajar y VIVIR. La diabetes, una anécdota.

Siempre y cuando controlemos el ejercicio y nuestra glucemia en sangre. Esta enfermedad que junto con la obesidad está considerada la epidemia del siglo XXI permite llevar una vida activa perfectamente normal gracias a médicos e investigadores, profesionales apasionados que no dejan de trabajar para que mañana sea de verdad una anécdota. Hay dos tipos principales de diabetes: Tipo I y tipo II. La primera es la mía, la insulino-dependiente o también llamada infantil, porque en un alto porcentaje de casos se presenta a edades tempranas, aunque yo "debuté" con esta enfermedad a los 44 años. Mi sistema inmune falló y atacó a las células del páncreas que producen la insulina sufriendo a continuación los tres síntomas del libro o las "tres Pes": Poliuria (orinar mucho), Polidipsia (sed horrible a todas horas) y Polifagia (hambre, hambre, haaaambre).



¿Porqué a mí? Pensé. A mí que toda la vida he hecho deporte, que sólo tres meses antes terminé mi Cuarta Maratón en Donosti, a mí que no fumo, a mí que soy un chico formal: Buen padre y ejemplar esposo, a mí que hago la declaración de renta puntualmente y pago la contribución urbana y el impuesto de circulación religiosamente cada año... ¿Porqué?



El estrés que tantos sufrimos en mayor o menor grado, herencia genética, un catarro mal curado, la contaminación, el agujero de la capa de ozono... Médicos, familiares, amigos, vecinos y yo mismo apuntamos una u otra causa, pero lo cierto es que daba lo mismo. El caso es que mi cuerpo -mi páncreas- casi no tenía reservas de insulina y que ya no iba a producir más -o muy poca- y que iba a necesitar "pincharme" insulina todos los días.

lunes, 9 de mayo de 2016

Euskal Trail


Estamos en el frontón de Urepel, un pueblo pequeñito dentro de un valle también pequeñito escondido bajo unas montañas que se elevan altas, muy altas, hasta las nubes que tapan sus cimas. No hace mucho frío pero los 600 corredores que nos apiñamos esperando la salida de nuestra primera etapa estamos destemplados después de madrugar para cumplir el programa: los autobuses que nos han traído desde Saint Etienne de Baigorri salían a las 5:15 y nos hemos levantado sobre las 4 para desayunar algo y preparar todo. 

Desayunando en la caravana: bizcocho del tío Carlos y café con leche

David, Alejo, Santi y yooooooo

La organización se retrasó en la salida los dos días ¡¡más de 15 minutos!!
 
 

La inscripción era obligatoria por parejas y la organización exige que vayan juntas durante el recorrido, de las 300 que estamos hay muchas mixtas chico-chica pero también muchas chica-chica y la mayoría son chico-chico.  Somos más hombres que mujeres pero observamos más participación femenina aquí que al otro lado de la frontera. Por supuesto nos fijamos en las chicas, todas guapísimas, pero Alejo mira hacia un grupo de gabachos comentando: -¡Están todos mazaos, fijaros!-.  David, Santi y yo reímos a carcajadas.  No hemos dejado de hacerlo desde que subimos a la autocaravana que hemos alquilado para venir.  Somos unos provincianos que casi no hemos salido del pueblo y aunque solo hay dos horas de viaje de Pamplona a Baigorri nos sentimos un poco perdidos sin saber una palabra de francés y muy pocas de euskara.  Es curioso como solo cruzando una línea en un mapa la mayoría de la gente habla otro idioma y todo es tan diferente, hasta en los cementerios, recuerdo de una vez que estuve en Alduides, las placas de los soldados caídos son en la I y II Guerra Mundial mientras que en España son de la Guerra Civil o la de Africa.  Mierda de guerras.

Ocho campeones: Arriba desde la izquierda Iñaki, Alejo, Santi, David, Jean Michel y yo. Abajo Eric y Jorge. Baigorri nos recibió con ¡¡32 grados de temperatura!! que nos asustaron al pensar tener ese calor durante la carrera al día siguiente. Por suerte no fue así y los días siguientes en Baigorri no subimos de 22 grados.
Hoy nuestro único enemigo son los kilómetros, el desnivel acumulado y las dificultades que ponga el terreno. Una batalla de 40 kilómetros con más de 2000 mts de desnivel positivos en un subi baja de montañas con techo en el Auza, recorriendo la muga entre Baztán y Alduides, Navarra y Zuberoa y casi siempre pisando suelo navarro pues aquí la frontera no sigue la divisoria de aguas. Estamos en Quinto Real - Kintoa, un territorio que pertenece jurídicamente a España aunque es explotado por Francia.  

David es la pareja de baile de Alejo y la mía es Santi.  Los cuatro iremos juntos hasta mitad del recorrido, caminando en las cuestas y corriendo alegres en los llaneos por los altos puertos donde ovejas y caballos nos miran curiosos.  Chabolas de cazadores y palomeras, cercados que delimitan los pastos y un horizonte de montañas entre las cuales sobresale el Adi (1457 mts) al que subiremos mañana.  Hoy lo dejaremos a nuestra espalda mientras nos dirigimos en dirección norte con la mirada puesta en el Autza (1304 mts). "Auza no será la montaña más alta del Valle de Baztán, pero sin duda será la más bella, la más espectacular, la más desafiante de todas ellas, mostando en la lejanía los más de mil metros de desnivel que le separan del pueblo de Errazu."  Luis Peña Santiago se refiere así a este monte en su libro El Pirineo Vasco.

Tramo de pista por el que ganamos altura. Al fondo se levanta el Adi que dejaremos para la jornada siguiente.






Disfrutamos corriendo por estos bosques

Pasamos muy cerca de la Arri-Kilinka 




Segundo avituallamiento. No podemos quejarnos de los avituallamientos en los que encontramos de todo, desde bizcocho con pasas, barritas, chocolate, fruta a caldo, cocacola y agua. También agua con gas a la que los franceses son muy aficionados.

Duras rampas de subida a la cima del Auza. El corredor que baja está haciendo la Ultra de 130 kmts y aquí irá por el kilómetro 35 ¡¡Bravoo!!

El Ori se distingue nevado en el horizonte.
Iñaki Arizala va de pareja con Jean Michel en su intento de hacer la Ultra. Aquí les saludamos cuando les falta muy poco para coronar la cima de Auza.
Jean Michel es el responsable de que todos estemos aquí disfrutando de estos magníficos paisajes. Nuestro amigo que aquí iba muy bien sufrirá un fuerte dolor en la rodilla en el kilómetro 65 y deberá abandonar.  El próximo año seguro que vuelve a intentarlo ¿y nosotros con él?  Jorge y Eric seguro que sí pues el primero tuvo problemas para respirar debido a un fuerte catarro que llevaba unos días sufriendo. ¡¡que mala pata!! Eric abandonó también con su compañero de equipo pues no quiso continuar en solitario, lo mismo que Iñaki. Comentar que en esta durísima prueba el total de abandonos fue muy elevado.

Bajar del Auza fue la parte más técnica y delicada del recorrido pero no fue demasiado complicada gracias a que el terreno estaba seco.

El Auza se queda atrás pero todavía deberemos subir dos "tachuelas" antes de bajar a Baigorri.

Allí abajo vemos Baigorri ¡¡Vamosssss!!

La tarde del Viernes la organización ofreció una cena (repas) a los corredores. Como puede verse teníamos de todo y nos pusimos las botas. ¡¡Y también había vino!!  Muy, muy buena cena. Eskerrik asko!!!
 
Santi y yo llegamos a Baigorri en un tiempo de 6:37, treinta y seis minutos más tarde que David y Alejo, lo cual dice mucho y bien de nuestra carrera puesto que Santi tuvo algún calambre en la bajada final que nos obligó a hacer alguna parada.  Y es que nuestro amigo ha estado parado en las últimas semanas por una tendinitis en el aquiles de su pie derecho, una vieja amiga que en los últimos años le viene tocando bastante las narices. Y eso es lo malo, que por la tarde, al enfriarse el pie después de la carrera empezó a dolerle y casi no podía andar. ¿Cómo iba a correr los otros cuarenta kmts de la etapa del día siguiente?  La organización permitía continuar a un corredor si su pareja se retiraba al día siguiente por lesión y también dejaba que se uniera a otra.  El pobre Santi no hacía más que darle vueltas al asunto: salir o no salir, correr desde luego que no porque era cuando más le dolía. Pero caminar sí le dejaba, con dolor también pero soportable.  - Nos lo tomaremos como una Javierada, ¿vale Santi?-, eso es lo que le dije aceptando no correr cuando salímos otra vez de Urepel a las 7 de la mañana.  David y Alejo quieren ir también con nosotros pero tras los primeros quinientos metros decidimos que es tontería, ellos están bien y pueden gozarla como jabalís en una etapa que resultará ser más corredera que la de ayer y también más bonita. ¡¡Vamossssss!! 

A mí no me vendrá nada mal ir tranqui junto a Santi, además de que será un buen entreno que no machacará mis viejas patas podré sacar a fotos a placer. Así que vamos allá!!!!  Los dos disfrutamos tanto o más que si hubiéramos ido corriendo. Santi podía llevar buen ritmo caminando y cuando enfrentamos la primera subida de la jornada que resultó ser bestial desde los 440 mts de altura de Urepel a los 1457 mts del Adi, adelantamos a numerosos participantes lo cual nos animó bastante pues pocas veces habíamos ido en la cola de una carrera.  Eso sí, en las bajadas y llaneos eramos adelantados también por muchos que antes habíamos alcanzado y conforme fuimos sumando kilómetros ya teníamos fichadas dos o tres parejas fijas con las que intercambiabamos posiciones continuamente. - ¡Venga Santi! ¡Que se nos escapa la rubita de las mallas roqueras! - le decía bromeando o también: - ¡dále caña que pillamos a las abuelas! - señalando una pareja de veteranas que corrían despacito cuando el terreno lo permitía y a las que dábamos caza tan pronto se ponía cuesta arriba.  Hablamos todo el rato y entre pitos y flautas, mira ese monte y mira ese pueblo o fíjate aquí cómo habán corrido esos dos pajáros, llegamos al último punto de control, donde igual que el día anterior nos juntamos con los corredores de la prueba de 2 x 25 kmts, la mayoría chicos y chicas jóvenes. Con la chavalería fuimos más animados, tanto que Santi a falta de dos kilómetros se vino arriba y viendo la meta, tan lejana y difícil al principio y tan cerca ahora, echó a correr y juntos llegamos a Baigorri más felices que unas perdices.

Santi y Alejo se llevaron un alegrón y nos recibieron como si fueramos los campeones.  Resultó que ellos hicieron mejor tiempo que el día anterior: 5 horas y 56 minutos, casi seis minutos menos, lo cual les situó en un estupendo 81 puesto en la clasificación. ¡¡Zorionak txapeldunak!!  Nosotros conseguimos hacerla esta segunda etapa en 8:43, apenas dos horas más que el día anterior. ¡¡Pues ni tan mal!!  Y seguro que nuestras patas estarán mejor mañana...  

Los cuatro magníficos dispuestos para la segunda etapa


¡¡Están todos mazaos!!

Subiendo nos cepillamos a todos estos...

Pero bajando se nos cepillaron a nosotros

Dura subida a la cima del Adi, tapado por las nubes. Soplaba mucho aire y nos pusimos todo lo que llevábamos, inclusive guantes y gorro pues el frío fue terrible. Increíble el trabajo y esfuerzo de los voluntarios en la cima.

El primer avituallamiento en el km 12 lo situó la organización en el Valle de Sorogain -Navarra-, junto a Casa Pablo.

Fuerte subida a Mendi Aundi dejando abajo Casa Pablo

Los hayedos de Sorogain

El Adi se queda atras pero no lo vemos, sigue tapado. Llegaron a caer cuatro gotas de las nubes que se apretaban encima nuestra pero en unas horas el tiempo mejoró y hasta vimos el sol un poco.

Bosques de Lindus, estamos encima de Ibañeta


El recorrido es fantástico para correr, pasear... Incluso para btt pues nos cruzamos con dos o tres fieras de las dos ruedas.


Después del CP4 subimos a Mendimotxa (1225 mts)
Mendimotxa a la izquierda y nuestro amigo Auza delante


Lo vamos a conseguir!!!!!
Auza dominando el valle de Alduides. Precioso.

Un aficionado nos anima. ¡¡Mila esker potoka!!


Caminos ancestrales


Ya falta menos!!!


Cuatro campeones - Lau txapeldunak!!!

A celebrarlo!!!!!




No os perdáis las fotos en Salernophotos

Y todo lo que queráis saber de este festival de carreras aquí, 



4 comentarios:

  1. Enhorabuena a todos, y en especial a ti Carlos y tu compañero...esos son dos compañeros de fatigas. Uno por echarle valor y decidir salir al día siguiente y el otro renunciar a correr. Seguro que lo pasasteis mejor que la mayoría. Apunto esa carrera para el año que viene para hacerla por parejas. Un amigo hizo este año la de 130 y le fue bastante bien, pero eso está al alcance de muy pocos. Un abrazo Carlos !!

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  2. Gracias Jero!! Ya he visto un Run19 entre los primeros campeones de la ultra... Yo estoy muy caliente para el próximo año pero ya veremos, que faltan 365 días y dos o tres pares de zapatillas a quemar en los entrenos....

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  3. Joder que paisajes, seguro que el 2º día los disfrutaste más. Yo aún no he hecho nunca una carrera de etapas, eso de meterse 40 kms un día, y al siguiente también.... Enhorabuena.

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  4. Gracias Yonhey!! Sí que disfrutamos más el segundo día pero también la hubiéramos gozado corriendo por esos senderos que se ven en algunas fotos, algunos de ellos discurrían llaneando mucha distancia a media ladera por encima del valle. Pensar que que corres por ahí y escuchar la banda sonora del Ultimo Mohícano es todo uno jajaja Solo nos faltarían los indios!!!

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